Edad: 5
Edad al diagnóstico: 2

Hola a todos. Soy Isabella y tengo 5 años. Me gustaría contarles mi historia para que vean que no todo es tan feo cuando tenemos alergia al trigo y otras cosas. Ahora ya sé que se llama Enfermedad celiaca, pero yo me siento tan bien que no creo que esté enferma, simplemente hay cosas que otros niños pueden comer y yo no.

Yo comía de todo hasta los 2 años de edad. Mi abuelita Mima, que me cuida cuando mis papás están trabajando,  se fue de viaje por un mes y quedé al cuidado de una nana. Durante ese tiempo tuve mucha diarrea, me llevaron a mi doctora y los exámenes que me hicieron  estaban buenos. Cuando llegó mi abuelita  me puse mejor, así que todos pensaban que era porque ella no me hacía la comida durante su viaje. Pero mis diarreas empezaron de nuevo y me llevaron a ver a un doctor que  sabía más de  enfermedades de la guatita. “Mi doctor Peña” me pidió un examen con el que se supo cual era el problema.

Inmediatamente deje de comer todas las cosas con gluten y según me cuentan mis papás, al principio fue un poco difícil que yo entendiera por qué no podía comer el pan de siempre, las barritas de cereal que tanto me gustaban, galletitas y otras golosinas que nos gustan a todos los niños. A esa edad yo no entendía lo que me podía pasar. Cuando me invitaban a algún cumpleaños mis papás se ponían nerviosos porque yo casi nunca podía comer las cosas que dan en las fiestas. Pero con el tiempo fui aprendiendo a identificar qué alimentos puedo comer y cuáles no. A los cumpleaños llevamos pasteles sin gluten que mis papás me compran el día anterior, cuando viajamos me dan una comida especial en el avión y llevamos una mochila con todas las cosas que yo pueda necesitar y que no se consiguen fácilmente en otros países u otras ciudades de Chile.

Con mi mamá hacemos queques en la casa y todos comen, no sólo yo. Tengo un mueble en la cocina sólo para mis cosas, mi propia tostadora de pan pequeñita, y una sandwichera para mis colaciones del colegio, porque ahora voy a prekinder. En mi colegio saben que yo no puedo comer algunas cosas y cuando alguna mamá lleva pasteles o cupcakes, o cuchuflíes, o torta, yo ya sé decir que no y si no sé les pregunto si esa comida se hace con harina.

A mí no me ha afectado casi en nada esta alergia. Ya llevo más de 3 años haciendo esta dieta sin gluten y me ha parecido bien porque no me enfermo.